jueves, 16 de octubre de 2014

4:28

Todo depende de nosotros mismos, de nadie más.

Revista Clave de Sol. Un artículo de Ángel Castaño Sánchez (Nailer).

No sé yo si será buen momento para comenzar con algo tan "serio" como escribir un artículo. Sino, mirad el título y preguntadle a la inspiración si son horas estas o no. Desde que tenía once años aproximadamente siempre me ha fascinado esto de la escritura, de hecho terminé la primaria siendo el más lector de mi promoción. Todo pareció torcerse en la adolescencia. Supongo que a esas edades es normal perder la noción de quien se es e intentar experimentar en busca de esa identidad con la que sentirse más cómodo. ¡Qué se yo!. ¿Tampoco he cambiado tanto, no? Me hice adulto casi sin querer. Prácticamente como todo el mundo, supongo que acabé madurando, aunque eso de madurar y crecer no vaya ligado. Creo que me entenderéis. Hoy se que no hay forma más eficaz de solventar los daños de un pasado poco satisfactorio que mediante el hábito. Ahora la pregunta es: ¿Qué haces tú con tu vida? ¿Vives al día o, en cambio, piensas a largo plazo? Un ejemplo:
No hay problema si te dedicas a algo que no te gusta mientras que eso no sea a lo que aspiras a dedicarte el resto de tu vida, puesto que estás de paso y en base a eso montarás una estrategia, ya sea ahorrando para abrir el negocio que tanto soñaste montar, o sacando tiempo de donde sea para hacer aquello que crees que te beneficiará en el futuro. Eso sí, creo que hay que ser paciente, estas cosas llevan su tiempo. Paciente y Constante. A diario no paro de encontrarme con desmotivaciones. De hecho, por muy bien que te vaya no dejará de haber momentos en los que te sientas sin ganas de enfrentarte a ciertos estímulos. Hay días en los que me acuesto sin haberne lavado los dientes, y el simple hecho de recordar que debo hacerlo supone un enorme esfuerzo para mí. Seguro que también os ha pasado. Todos tenemos algo de vagos dentro, una personalidadd que nos lastra dándonos escusas e impedimentos para hacer lo que toca. Pero,...¿Y si te ijera que podemos matarlo? Todo depende de lo motivado que se esté y de lo soñador que se sea, y, como es de esperar, de nosotros mismos y de nadie más.